A más de diez años, nuevos desafíos y una nueva mirada territorial.
A más de una década de su promulgación, la actualización de la Política Nacional de Desarrollo Urbano es clave para avanzar hacia ciudades más justas, integradas y sostenibles, en coherencia con los desafíos actuales de la planificación territorial en Chile. Es necesario seguir avanzando en la disminución de la fragmentación urbana, mejorar el acceso equitativo a servicios y equipamientos, y orientar de mejor forma el crecimiento urbano para evitar la pérdida de suelos agrícolas y ecosistemas de alto valor. También han cobrado fuerza nuevas prioridades, como la necesidad de reconocer la interdependencia entre lo urbano y lo rural, así como asegurar que las políticas públicas cuenten con pertinencia territorial, reconociendo que no hay una única solución válida para todas las realidades del país. Asimismo, la adaptación al cambio climático, la gestión de riesgos, el enfoque de cuidados y una participación ciudadana más incidente son hoy aspectos centrales. Contar con una política actualizada permitirá proyectar una visión integrada del desarrollo urbano que considere los impactos y oportunidades del territorio en su conjunto, pensando en la sostenibilidad del país y en el bienestar de las generaciones futuras.
En dicha labor, el Consejo Nacional de Desarrollo Territorial (CNDT) llevó adelante un diagnóstico participativo a nivel nacional, que incluyó la aplicación de encuestas, la realización de diálogos ciudadanos en distintas regiones, conversatorios en universidades, estudios técnicos y talleres con funcionarios públicos, asesores y municipios. Este proceso, que involucró a cerca de dos mil personas, permitió recoger una amplia diversidad de perspectivas para fortalecer la planificación territorial desde una mirada colaborativa y representativa. Para ello se realizaron las siguientes actividades.